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Una curiosa propuesta para celebrar el carnaval donde todos los que asistan serán empolvados o podrán empolvar con polvo talco, como manda la tradición.

Tolox es uno de esos pueblos que se distingue por mantener sus tradiciones más ancestrales, esto ocurre con su propia versión del Carnaval. Desde hace décadas se celebra el Día de los Polvos una fiesta en la que según la costumbre, los habitantes del pueblo se arrojan entre ellos polvos de talco hasta quedar totalmente ‘enharinados”. Este año es el 12 de febrero, el último día de Carnaval y se celebrará durante toda la mañana en la Plaza Alta.

Esta tradición parece proceder del siglo XIX, cuando los mozos recurrían a este juego para declararse a sus amadas y éstas evitaban salir a la calle provocando que los muchachos se las tuvieran que ingeniar para conseguir ‘enharinar’ a sus pretendidas, no dudando en entrar por chimeneas o saltar alguna verja con tal de conseguir su propósito. Hay también referencias en algunas crónicas que aseguran que esta costumbre se remonta al siglo XV, y que el origen fue una disputa entre una morisca y una cristiana, ambas trabajadoras de un horno de leña y enamoradas del mismo hombre. La discusión fue subiendo de tono y acabaron arrojándose entre sí toda la harina que encontraron a mano.

Hoy en día, la tradicional fiesta ha sustituido la harina original por el polvo de talco, al mismo tiempo que se ha perdido el carácter amoroso de la fiesta original. Por lo que los toloxeños y visitantes volverán a empolvarse unos a otros sin distinción de sexo ni procedencia.

 

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